El primer cuarto fue un pulso precioso (2–2), con los dos equipos midiéndose y la grada entrando rápido en partido. En el segundo, WP Navarra B dio un paso al frente (4–2), apretando atrás y encontrando buenas soluciones en ataque para llegar con ventaja al descanso. Tras la reanudación, el duelo se rompió en ida y vuelta (4–4), con momentos de mucha emoción y carácter. En el último periodo, Sestao apretó de lo lindo (5–6), pero el equipo sostuvo la cabeza fría y, empujado por la grada en la piscina Fermin Manso, cerró un 15–14 que sabe a unión y esfuerzo colectivo. Gracias a la afición por no dejar de creer: partidos así se ganan también desde la grada. Aprendemos, disfrutamos y seguimos compitiendo juntos.